Cuando bailes honra la tierra que te sostiene y que te nutre
porque que es su impulso lo que te permite volar al cielo.
Deja que sea tu corazón el que hable a través de los movimientos
que como olas se mecen armónicamente en tu cuerpo.
Cuando bailes inunda el mundo que te rodea con la luz de tu existencia,
deja que lo divino hable a través de ti.
Escucha cada silencio y cada nota para nutrir tu alma
e interpretar la música celeste que tan amorosamente te es dada.
Cuando bailes traduce lo sagrado para traerlo a este mundo,
danza lo bendito y danza lo mundano pero nunca pierdas la voz de tu corazón
Baila a través del tiempo con alegría para sanar todas las tristezas del pasado,
baila sabiendo que cada momento es único y no se repetirá.
Cuando bailes, crea, ríe, salta, llora, expande y contrae todo tu ser.
Cuando bailes sé la chispa divina en la tierra que todos necesitamos para crecer.
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